Adolescentes

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martes, 23 de marzo de 2010

¿qué es la depresión?

La depresión afecta el cuerpo, el ánimo y los pensamientos. Puede afectar la manera en que te sientes sobre ti
mismo y sobre los demás. Si no se somete a tratamiento, puede afectar el trabajo, la familia, los hábitos del
comer, el dormir y la vida en general. No es posible ignorar la depresión y pensar que desaparecerá con el tiem-
po. Los síntomas pueden empeorar con el paso del tiempo. Es importante buscar tratamiento, ya que la mayoría
de las personas afectadas pueden seguir una vida plena una vez que inician el tratamiento.
Quien sufra de depresión tiene sentimientos de desesperanza y desesperación que pueden llegar a obstaculizarle
muchos aspectos de la vida y afectarle actividades de las que antes disfrutaba. La depresión puede ocurrir una
vez en la vida de las personas aunque es común que ocurra varias veces.

Tipos de depresión

Depresión severa: (Trastorno Depresivo Mayor) se manifiesta por una combinación de síntomas que interfieren con la capacidad para trabajar, estudiar, dormir, comer, etc. Es decir, es un tipo de depresión incapacitante que altera la vida del paciente.

La Distimia; También conocida como depresión crónica, afecta a un porcentaje pequeño de la población (entre un 3 y un 6%) y se caracteriza por la presentación de la mayoría de los síntomas que aparecen en la depresión mayor, aunque dichos síntomas suelen ser menos intensos en este caso y se prolongan más en el tiempo (como mínimo dos años). Los pacientes aquejados de distimia pueden llevar una vida normal pero se sienten permanentemente deprimidos, tienen dificultad para disfrutar la vida y no muestran cambios aparentes en la conducta o comportamiento diario, aunque tienen menos energía, una negatividad general, y un sentido de insatisfacción y desesperanza.

Depresión Doble. Esta es una complicación de la distimia. Los síntomas empeoran con el paso del tiempo y los pacientes sufren un episodio de trastorno depresivo mayor escondido tras la depresión crónica. En este caso, la depresión es denominada depresión doble.

El Trastorno Bipolar o enfermedad maniaco-depresiva es una alteración de los mecanismos que regulan el estado de ánimo. Quienes la sufren pasan alternativamente de la euforia o "manía" a la depresión, llegando a necesitar, en ocasiones, la hospitalización. Los cambios de estado de ánimo pueden ser dramáticos y rápidos, pero más a menudo son graduales. Cuando una persona está en la fase depresiva del ciclo, puede padecer de uno, de varios o de todos los síntomas del trastorno depresivo. Cuando está en la fase maníaca, la persona puede estar hiperactiva, hablar excesivamente y tener una gran cantidad de energía. Este trastono, no es tan frecuente como los anteriores y si la manía se deja sin tratar puede empeorar y convertirse en un estado psicótico (el paciente pierde temporalmente la razón).

El trastorno bipolar suele iniciarse en la vida adulta y, aunque es menos común, también puede comenzar en la adolescencia y raras veces en la niñez. El trastorno bipolar puede afectar a cualquier persona sin embargo, el factor hereditario desempeña un papel importante, de modo que si uno o ambos progenitores padecen un desorden bipolar, existe mayor probabilidad de que los hijos desarrollen el mismo desorden.

Depresión Atípica.- Las personas con depresión atípica generalmente comen y duermen con exceso, tienen un sentido general de pesadez, y un sentimiento muy fuerte de rechazo.

Trastorno Afectivo Estacional: el trastorno afectivo estacional (SAD) se caracteriza por episodios anuales de depresión en otoño o invierno, que remiten en primavera y verano. En estas épocas pueden ser sustituidos por fases maníacas. Otros síntomas incluyen fatiga, tendencia a comer exceso (particularmente hidratos de carbono), a dormir invierno. Es importante destacar que los cambios estacionales suelen a todas las personas y que no por ello se debe confundir con una depresión estacional.

Trastorno Disfórico Premenstrual. El síndrome de depresión severa, irritabilidad, y tensión que precede a la menstruación se conoce como trastorno disfórico premenstrual (PDD o PMDD) (también llamado trastorno disfórico luteínico tardío). Este trastorno suele afectar a un porcentaje mínimo de las mujeres (entre un 3 y un 8%) y su diagnóstico depende de la presencia de cinco síntomas típicos de la depresión severa, que aparecen durante la mayoría de ciclos menstruales, y que empeoran aproximadamente una semana antes del período menstrual y desaparecen después.

Psicologos y páginas de ayuda

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Depresion en la adolescencia

La depresión es uno de los conceptos dinámicos que tiene su origen en la obra original de Freud de duelo y melancolía, pero que ha crecido a lo largo del tiempo y que todavía hoy está en proceso de desarrollo, es importante definir el concepto de duelo como la reacción normal ante una pérdida real en donde se retira la energía del objeto perdido, regresando hacia el propio individuo, siendo el sentimiento predominante el de abatimiento y tristeza.

Abrahan ha sido uno de los autores que ha puesto más importancia en el papel que desempeña la oralidad en la depresión. hecho que fue posteriormente estudiado por Radó y Fenichel, el primero analizó la influencia de la situación de lactancia sobre el yó infantil y de esta manera amplió el concepto de oralidad para abarcar todas las sensaciones placenteras que experimenta el lactante junto al pecho de su madre tales como los sentimientos de calor, seguridad y nutrición.

Edward Bibring propuso un modelo de depresión, basado en el conflicto que implica la expresión emocional de un estado de desvalidamiento e impotencia del yó, siendo característica de las personas que padecen de depresión:

1.- El deseo de ser valioso, amado y apreciado.
2.- El deseo de ser fuerte y tener seguridad.
3.- El deseo de ser bueno y amable.

Este autor creía que lo que llevaba a la depresión es la tensión entre las aproximaciones propias y la conciencia que el yó tiene de su desvalidamiento.

En el análisis histórico de la depresión hay conceptos e ideas que parecen asomar una y otra vez como es: la persistente conexión de la fase oral del desarrollo y la unidad madre/hijo, la regulación de la autoestima y finalmente una asociación normal entre agresión, hostilidad, super yó y culpa resultante.

Thederese Benedeck demostró que la naturaleza de la constelación depresiva descansa en la psicología de la función procreadora y en los propios cuidados maternales "Constelación" que se entiende de acuerdo a las propias interacciones recíprocas entre la madre y el hijo.

Para Burton "la depresión es la más universal de las aflicciones humanas" y duda que exista algún individuo que deje de experimentarla a lo largo de su existencia, por lo tanto, es un fenómeno muy frecuente en los jóvenes, ya que sabemos que la angustia los afecta tanto como al adulto.

Clínica
La adolescencia es una etapa, periodo o estado que se presenta con características bien definidas en el gradual desarrollo del hombre, aparece como un salto importante entre la infancia y la adultez; para algunos autores, la adolescencia se considera como el segundo nacimiento, ya que el joven necesita resolver los problemas de ser en función de si mismos y en relación asar grupo familiar. La mayoría de las investigaciones hechas en relación a las emociones en la adolescencia concluyen, que en este periodo existe un aumento de la emotividad, la cual es provocada por la necesidad que experimenta el ser humano de abandonar viejos hábitos de acción y de pensamiento y de establecer otros nuevos, así también desde el punto de vista de la conducta observada se considera que el adolescente vive en una desubiación en el tiempo, convirtiendo el tiempo en un presente y en un activo en un intento de manejarlo. Durante esta apoca el desarrollo de las facultades cognoscitivas del adolescente le permiten constituir un sistema de pensamiento que incluye la responsabilidad ante los demás, la internalización de valores y normas y un incipiente sentido de si mismo. A esta edad se encuentra mas preocupado por la opinión de sus iguales o de la sociedad que por lo que opinan sus padres.

Sin embargo, lleva dentro de si mismo y trasmite a la comunidad los sistemas internalizados de creencias familiares que aprendió en el hogar, de acuerdo a estas enfrenta la frustración de diferentes maneras y recurre a diversos mecanismos de defensa, pudiendo mostrar una reacción afectiva inicial ante las frustraciones o a la pérdida de bienestar. Se produce entonces la consolidación de los procesos adaptativos, de modo que el niño reacciona a la tensión de una manera característica y reiterativa.

El crecimiento cognoscitivo de la pubertad permite que el adolescente se evalúe desde el punto de vista moral. En vista de las demandas impuestas por la vida puede sentirse indigno o falto de valores, siendo frecuente la disminución de la autoestima. El estado afectivo deja de ser una evaluación lógica y personal. Solo hacia el final de la niñez es posible observar en la práctica clínica episodios depresivos comparados con el adulto. LAS DEPRESIONES DE LA ADOLESCENCIA IGUALAN A LAS DE LA EDAD ADULTA EN SEVERIDAD, LA SOBREPASAN EN AUTODESTRUCTIVIDAD Y MUESTRAN TODAVIA EL SELLO CARACTERISTlCO DE SU CONCOMITANTE CON EL PROCESO DE DESARROLLO. El adolescente piensa constantemente en el futuro, la idea del tiempo sobresale en el pensamiento. Para el todas las acciones o experiencias son irrevocables y eternas, al igual que la vergüenza y la desesperación que la provocan. Este exagerado énfasis entre el hay y el mañana escapa a la seguridad del niño y esta mitigado por la mayor experiencia del adulto. EL ADOLESCENTE SIENTE QUE TODO SE HAPERDIDO Y QUE NADA PUEDE REDIMIRSE EN CONSECUENCIA SE DEPRIME.

Otro factor que influye en la depresión es la falta de moderación del pensamiento, ya que el joven parece vivir en un mundo del "todo o nada" dando a hechos triviales una trascendencia desmedida reaccionando de una manera dramática y terminable. Todos estos factores expuestos es lo que llevó a Anna Freud a plantear de que todos los adolescentes se encontraban en un estado de duelo y que en realidad añoraban los períodos de la niñez en donde las soluciones eran relativamente simples.

La depresión puede ser una respuesta temporal a muchas situaciones y factores de estrés. En adolescentes, el estado anímico depresivo es común debido a:

El proceso normal de maduración y el estrés asociado con éste
La influencia de las hormonas sexuales
Los conflictos de independencia con los padres
También puede ser una reacción a un suceso perturbador, como:

La muerte de un amigo o pariente
La ruptura con la novia o novio
El fracaso en la escuela
Los adolescentes que presentan baja autoestima, que son muy autocríticos o que perciben poco sentido de control sobre los acontecimientos negativos presentan un riesgo particular de deprimirse cuando experimentan vivencias estresantes.

Las niñas adolescentes presentan el doble de posibilidades de experimentar depresión que los niños.

Depresion infantil

La depresión que antes solo se diagnosticaba en personas adultas, está cada día haciendo sufrir también a los niños. Ya no son sólo los adultos los que se deprimen. La depresión infantil, según Cynthia Callahan, gerente de una clínica de orientación infantil, en Madera, puede surgir a causa de "cambios importantes y estrés", como resultado de la pérdida de los padres, un divorcio, o problemas familiares, etc.
Aproximadamente el 5 por ciento de los niños de la población general padece de depresión en algún momento. Los niños que viven con mucha tensión, que han experimentado una pérdida o que tienen desórdenes de la atención o de la conducta, o discapacidades en el aprendizaje, o aún problemas de salud mental, corren mayor riesgo de sufrir depresión.


¿Mí hijo tiene depresión?
Seguro que en algún momento de la infancia de su hijo, alguna madre se ha preguntado eso. Lo primero que hay que decir es que cada niño es único en su forma de ser. Hay que conocer muy bien al niño y saber lo que es realmente normal en su comportamiento.

No hay que apresurarse a sacar conclusiones. Padres y profesores han de estar atentos cuando algún niño presente alguna de las siguientes características
- está continuamente triste, llorando con más facilidad
- pierde el interés por los juegos preferidos y por la escuela
- se aleja de sus amigos y de la familia
- presenta una comunicación pobre
- se aburre y se cansa con facilidad
- presenta menos energía o concentración
- se queda irritable o demasiado sensible frente a pequeñas frustraciones, montando rabietas o berrinches con más facilidad.
- se le nota extremamente sensible hacia el rechazo y el fracaso
- expresa baja autoestima, depreciándose a ellos mismos
- elige "finales tristes" para sus cuentos y representaciones
- se comporta de una manera agresiva
- se queja constantemente de dolores tales como de cabeza o de estómago
- duerme demasiado o muy poco
- come demasiado o muy poco
- sufre una regresión, hablando como un bebé u orinándose en la cama
- habla de suicidio
- habla de escaparse de la casa


La depresión también afecta a los bebés
Con niños de hasta tres años, las señales para preocuparse empiezan cuando esos niños parecen tristes o decaídos aun cuando se les están consolando. Pueden, incluso, que se peguen desesperadamente a quien se ocupa de ellos o que dejen de comunicarse.
La depresión en esos niños está casi siempre conectada con el cambio o pérdida de la persona responsable de su cuidado, o cuando quien les cuida no es capaz de responder a sus necesidades.
La depresión en los bebé se ve reflejada en su estado anímico; lo que no quiere decir que el bebé llora porque está triste, sino que da la impresión de que está apático y sin ninguna iniciativa.
En cuanto a las señales que manifiesta el bebé, está el hecho que no rechace los brazos de un desconocido, significa que algo pasa ya que lo normal es que el bebé tenga angustia por la separación de su madre y se ponga a llorar. Otra señal se muestra cuando el niño no siente deseos de llamar la atención, ya que a esta edad lo normal es que el bebé quiera atraer la atención de las personas que lo rodean.
Las consecuencias que puede tener la presencia de un cuadro depresivo en el bebé son varias. Puede producir cierto retraso en el desarrollo como el inicio de la marcha más tarde de lo normal, el inicio del habla, tener problemas de sueño, somatizaciones frecuentes, enfermedades de tipo infecto-contagioso debido a una disminución de las defensas biológicas que permanecen más allá de todo cuidado, alteraciones en la alimentación que mantienen al bebé en un estado de decaimiento.


Qué se puede hacer en esos casos
No ignore los síntomas de depresión
Dé mas atención de lo normal a su hijo. Juegue con él y así le será más fácil hablar sobre sus problemas. Lea libros infantiles con temas relacionados, dibuje, pinte, construya un puzzle con su hijo. Debe dedicarle un momento especial y único y así, crear un ambiente más cercano y de confianza.

Señales de depresion infantil

¿Cómo uno puede ayudarse a si mismo cuando está deprimido?

Los trastornos depresivos hacen que uno se sienta exhausto, inútil, desesperanzado y desamparado. Esas maneras negativas de pensar y sentirse hacen que las personas quieran darse por vencidas. Es importante ser consciente de que las maneras negativas de ver las cosas son parte de la depresión. Estas son distorsiones que, por lo general, no se basan en circunstancias reales. Los pensamientos negativos desaparecen cuando el tratamiento empieza a hacer efecto. Mientras tanto:



Fíjese metas realistas, tomando en cuenta la depresión, y no trate de asumir una cantidad excesiva de responsabilidades.

Divida las metas en partes pequeñas, establezca prioridades y haga lo que pueda cuando pueda.

Trate de estar acompañado y de confiar en alguna persona; siempre es mejor que estar solo y no hablar con nadie.

Tome parte en actividades que le ayuden a sentirse mejor.

Haga ejercicio liviano, vaya al cine, vaya a un juego deportivo, o participe en actividades recreativas, religiosas, sociales o de otro tipo. Todo eso puede ayudar.

No espere que su estado de ánimo mejore de inmediato, sino gradualmente. Sentirse mejor toma tiempo.

Es aconsejable que posponga las decisiones importantes hasta que la depresión mejore. Antes de hacer cambios importantes, como cambiar de trabajo, casarse o divorciarse, consulte con personas que lo conozcan bien y tengan una visión más objetiva de su situación.

La gente rara vez sale de una depresión de un día para el otro. Pero se puede sentir un poco mejor cada día.

Recuerde, patrones positivos de pensamiento eventualmente van a reemplazar los pensamientos negativos que son parte de la depresión. Los patrones negativos van a desaparecer tan pronto su depresión responda al tratamiento. Recuerde, tan pronto su depresión responda al tratamiento, los pensamientos negativos van a ser reemplazadas por pensamientos positivos.

Deje que sus familiares y amigos le ayuden.¿

Síntomas y Diagnostico

Estos son los síntomas principales del trastorno depresivo:

La persona pierde el interés en casi todas las actividades usuales, y en las que antes le ocasionaban placer.

Prefiere estar triste, desesperanzada, desanimada. A menudo recurre a expresiones como: "me siento dentro de un hoyo", "creo que toqué fondo".

Hay trastornos del apetito, generalmente por disminución del mismo, junto con una pérdida significativa del peso. Otras personas muestran un aumento del apetito o de la ingestión de alimentos -aunque no haya apetito- y también del peso.

Son comunes los trastornos del sueño: dificultades para quedarse dormido, sueño interrumpido, demasiado sueño (hipersomnia).

El aspecto psicomotor sufre alteraciones: la persona puede sufrir episodios de agitación, incapacidad para permanecer tranquila, estallidos de queja o de gritos.
En el otro extremo se da lo que se denomina “lentificación psicomotora”, que se traduce en un hablar muy pausado y en movimientos corporales lentos.

La persona experimenta una fatiga constante, hasta la tarea más pequeña puede parecer una tarea difícil o imposible de lograr.

A esto se agrega un sentimiento de minusvalía. El individuo cree que todo lo ha hecho mal; y recuerda sus errores, magnificándolos. Se reprocha, incluso, detalles mínimos, y busca en el ambiente cualquier signo que refuerce la idea de que él no vale nada.

Hay sentimientos de culpa, igualmente exagerados, sobre situaciones presentes o pasadas.

Es frecuente que la persona tenga dificultades para concentrarse, y que le cueste tomar decisiones o recordar las cosas pasadas.

Se presentan pensamientos constantes acerca de la muerte, que incluso llevan a elaborar ideas suicidas. Aunque puede sentir miedo de morir; no obstante estar convencido de que él y los demás estarían mejor si falleciera.

También se presentan síntomas como: llanto frecuente, sentimientos de angustia, irritabilidad, mal genio, preocupación excesiva por la propia salud física, ataques de pánico y fobias